En la era digital, el verdadero sabor no solo está en el plato, sino también en la historia que se cuenta alrededor de él. La gastronomía, como expresión cultural y emocional, encuentra hoy uno de sus mejores aliados en los creadores de contenido: personas con criterio, pasión y una comunidad que confía en sus recomendaciones. Y cuando se alinean las experiencias auténticas con el talento adecuado, los resultados superan cualquier expectativa.
Hace unas semanas, tuvimos el privilegio de colaborar en un proyecto muy especial con la Agencia Catalana de Turismo, en el recinto del Món Sant Benet. El objetivo era claro: mostrar la riqueza y diversidad de la gastronomía catalana no solo a través de imágenes bonitas, sino a través de vivencias realesreproduciendo un mercado típico con los productos más especiales de cada territorio. ¿El resultado? Un evento inolvidable que reunió a más de 40 influencers y creadores de contenido foodie de distintas partes del mundo. y generó un gran número de impactos mediáticos en distintos países.

¿Qué hace potente a una campaña con influencers gastronómicos?
- La afinidad con el público: no se trata de números, sino de conexión. Un foodie con una comunidad comprometida puede tener más impacto que una celebridad con millones de seguidores.
- El contenido experiencial: mostrar es bueno. Vivir y contar, es mejor.
- El valor de lo local: los creadores aprecian lo auténtico. Y eso se transmite.

Cintet en su taller experiencia de salsas de xató, romesco y calçots.
Comunicar desde el sabor, conectar desde la emoción
En nuestra agencia, creemos firmemente en que la comunicación gastronómica no es solo marketing: es cultura, es territorio y es emoción. Y trabajar con influencers no es una moda, sino una herramienta poderosa si se usa con estrategia, sensibilidad y autenticidad.
